En el artículo anterior os explicábamos qué es la hipoacusia neurosensorial, sus causas y sus síntomas. En esta ocasión vamos a profundizar en el tratamiento.
El tratamiento varía dependiendo de la severidad de la hipoacusia y de si afecta a uno o a ambos oídos.
En uno o ambos oídos:
Hipoacusia neurosensorial de leve a severa:
En estos tipos de pérdida la mejor solución son las prótesis auditivas. Los audífonos dan a cada usuario la ganancia necesaria en cada frecuencia para mejorar su audición. También nos ayudan a mejorar la localización de la fuente sonora ya sea ésta una persona que nos habla o un sonido que nos avisa de un posible peligro. Además gracias a su reductor de ruido permite a los usuarios poder mantener una conversación tanto en ambientes silenciosos como en ambientes ruidosos. Todas estas ayudas que proporciona el audífono ayuda al usuario a mejorar su audición y su entendimiento.
Hipoacusia neurosensorial profunda:
En este tipo de pérdida se necesita una gran amplificacion del sonido, cuando el audífono ya no puede proporcionar esa amplicaficació la única solución es un implante coclear.