La audiometría es prueba audiológica que nos permite valorar de forma rápida y fiable la capacidad auditiva de una persona, obteniendo sus umbrales auditivos tanto por vía aérea y por vía ósea. Es una prueba subjetiva ya que se necesita la colaboración activa del paciente para poder realizarla.
Antes de entrar a fondo sobre la audiometría, es conveniente conocer el proceso que sigue una correcta audición:
- El pabellón auricular u oreja capta los sonidos.
- El pabellón auricular u oreja capta los sonidos
- Los sonidos pasan a través del conducto auditivo externo
- El sonido llega al tímpano y el choque de la onda sonora con la membrana timpánica lo hace vibrar
- Esta vibracion se transmite por la cadena de huesecillos, la cual amplifica la onda sonora.
- La onda sonora llega a la cóclea, donde estímula las celulas ciliadas y éstas transforman la onda sonora en impulsos nerviosos.
- Estos impulsos nerviosos viajan a través del nervio auditivo hasta el cerebro donde son interpretados.
Cuándo se debe realizar una audiometria
Todo el mundo puede hacerse una audiometría aunque no tengan una pérdida auditiva, pero es recomendable, que las personas que tengan sospecha de pérdida auditiva, se realicen una audiometria por lo menos una vez al año.
Además hay casos específicos en los que siempre es conveniente realizar una audiometría. Estos serían:
- Recién nacidos. Actualmente entre las pruebas médicas que se realizan a los recién nacidos se incluye un screening neonatal donde se realizan las pruebas auditivas necesarias (OEA y PEATC) para poder detectar un problema auditivos desde el nacimiento.
- Mayores de 55 años: Aunque no haya sospecha de sordera, es recomendable realizarla a todas las personas mayores de 55 años para detectar a tiempo posibles problemas auditivos y en caso de que la prueba sea normal, se recomienda repetirla cada año.
- Tras enfermedades de riesgo como meningitis, sobre todo en niños, traumas craneoencefálicos, otitis, etc.
- También se recomienda realizar una audiometría en casos de toma de medicamentos que pueden dañar al oído, de roturas de tímpano, etc ya que son frecuentes causas de hipoacusia.
En qué consiste la audiometría
Para realizar la audiometría se utilizan tonos puros de intensidad variable presentados por vía aérea y vía ósea. La intensidad es el volumen que tiene un sonido y se mide en decibelios. El ser humano puede escuchar sonidos entre 0 – 120dB. Las frecuencias exploradas en la audiometría van desde 125Hz hasta 8000Hz, aunque el oído humano es capaz de percibir sonidos entre 20-20000Hz.
La audiometría se puede realizar en una cabina o en una sala completamente insonorizada. Al paciente se le colocan unos cascos por los cuales se le presentan una serie de tonos puros de diferente intensidad y frecuencia. El paciente debera levantar la mano o pulsar un pulsador cada vez que oiga el sonido.
La audiometria es una prueba segura y rápida que se realiza en 10 minutos. Sus resultados son altamente fiables y nos indican si hay una pérdida auditiva, el grado de pérdida auditiva y lo más importante la zona de la vía auditiva que esta dañada. Dependiendo de la zona dañada, la hipoacusia producida sera de un tipo u otro (hipoacusia de transmisión, neurosensorial o mixta).
¿Necesitas una audiometria?
Si sospecha de que usted o algun familiar tiene algún síntoma de pérdida auditiva, no lo dude, acuda a un centro auditivo para que le realicen un estudio audiológico completo.
¡Consúltanos!